Costumbres caraqueñas: Colección de artículos literarios y políticos, publicados en distintos periíodicos y muchos inéditos

Front Cover
el Angel guardián, 1882 - 202 pages
 

Selected pages

Contents

Other editions - View all

Common terms and phrases

Popular passages

Page 8 - Todo eso no viene al caso, Le responde el Cuervo; Porque aquí solo tratamos De ver qué tal vuelo.
Page 92 - Padre nuestro, que estás en los cielos: santificado sea el tu nombre, venga á nos el tu reino, hágase tu voluntad así en la tierra como en el cielo. El pan nuestro de cada día, dánosle hoy, y perdónanos nuestras deudas, así como nosotros perdonamos á nuestros deudores. Y no nos dejes caer en la tentación, mas líbranos de mal. Amén.
Page 167 - ... amarse! ¡Soy viejo; de toda esa belleza alzada con todo el empeño de mi voluntad, no queda nada; tan sólo una fría baba blanquecina, de espuma, que me ha escupido las manos y el corazón!... Sus ojos se llenaron de lágrimas, pero la tierna sonrisa no se borró de sus labios.
Page 98 - le embocaron las siete totumas y, como él se desmontara del caballo, sabe Dios con qué intenciones, las insurrectas lo cogieron en peso, lo metieron en la casa como niñito de bautismo y, sin ningún escrúpulo, lo introdujeron dentro de una gran pipa llena de agua hasta los bordes. Su excelencia tomó un soberbio baño, rió a carcajadas de la buena ocurrencia y del atrevimiento de las muchachas, y se volvió a casa en medio de sus lanceros, exclamando: ¡Es una temeridad pretender abolir una...
Page 44 - ño 179 ...... una íinda casa de campo á inmediaciones de la ciudad, en un , pintoresco sitio llamado el Empedrado, por la irónica contrariedad de no encontrarse allí ni una piedra, sino menuda arena, flores...
Page 141 - ... los pisos, lustraban los muebles, fregaban las copas, cascaban nueces, pelaban frutas y destapaban frascos y botellas. Doña Catalina lo inspeccionaba todo y estaba en todas partes, como un general experto que dispone sus batallones y 'alista su parque eu, presencia del enemigo.
Page 97 - Monagos (no especifica cuál de los dos), hacia 1850 y pico. Pero, dejemos la palabra al insigne costumbrista: ". . .al efecto, ocupó la ciudad militarmente con los batallones veteranos, la milicia y la policía. Por de pronto, todo el mundo se metió en barajas; y al ver lucir los sables y los fusiles, se creyó logrado el objeto. Mas parece que una señorita muy distinguida, fina y hermosa, echó un poquito de agua perfumada a un coronel amigo, y que éste devolvió la galantería con otro perfumador,...
Page 99 - ... multitud caprichosa de disfraces alegóricos, máscaras de toda especie, alegres comparsas, en coche, carros, carretas y carretones, graciosamente adornados; caballería entusiasta; músicos que tocan aires populares. . . todos silban, gritan, cantan y, cual viviente bachaquero, llenan, animan y alborotan todas las calles de la ciudad".
Page 95 - Y por mucho que te alhague la vanidad y te ciegue... no hay plazo que no se llegue ni deuda que no se pague. WENCESLAO AYGUALS DE Izco. EPIGRAMAS. Doña Inés , abuela mía , ha dicho siempre muy recio que el hombre es sabio ó es necio según qué leche le cria. Y aunque esta verdad aburra á mi señor don Pascual, bien se conoce que el tal toma la leche de burra.
Page 141 - No habia pegado sus ojos en toda la noche, pensando en multitud de menudencias que para ella eran de trascendental importancia, puesto- que de las tales menudencias, dependía el buen éxito de la batalla culinaria que dqbía librar en la siguiente alborada.

Bibliographic information